Durante el IV Congreso de Investigadoras del Sistema Nacional de Investigadores (SNI) y de Iberoamérica, la doctora Beatriz Gutiérrez Müller invitó a sus colegas a seguir luchando por la equidad en el rubro.
En su participación como ponente, desde el Colegio Carolino de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), presentó su perspectiva de las mujeres en la ciencia.
Dijo que 42 mil mexicanos logran reunir los requisitos que demanda el Sistema Nacional de Investigadores, sin embargo, las mujeres son minoría.
Además, la investigación es una carrera de tiempo completo, por eso muchas investigadoras están solteras, no tienen hijos o tienen una vida personal muy limitada, porque muchas se ven obligadas a optar entre su vida personal o el desarrollo de su vida profesional.
Añadió que los hombres investigadores no son tan solidarios con las mujeres dedicadas a la investigación, menos si son su pareja, porque hay un remanente de machismo.
Tan solo con la pandemia, sin detallar cifras, dijo que aumentó la productividad de los varones investigadores y descendió de manera importante el trabajo de las investigadoras.
“En mi caso, además de asumir mi trabajo, acepto que soy pie de casa, no me quejo, lo asumo con alegría y responsabilidad y estoy muy segura de que la mayoría de nosotras lo hace con un resignado silencio porque ya sabe que el señor afirmará que si repartimos el trabajo doméstico él alegará que no se concentra, que no puede con todo, que el brazo le duele más que nunca, que está enfermo y que la carga le pesa”, expresó.
Y continuó: “Quejémonos de la inequidad y chistemos de las puertas de la casa para adentro, pero demos la batalla y sigamos demostrando que podemos ser multitask porque tales son nuestras circunstancias. No hay peor lucha que la que no se hace. Lo que cuenta es vencer la adversidad”.
A decir de la doctora, otras de las razones por las que hay pocas mujeres investigadoras, además de tener que dividir sus responsabilidades con las labores de casa, es que las instituciones internacionales que certifican, así como los comités editoriales donde se publican los trabajos y las comisiones evaluadoras son conformadas en su mayoría por hombres.
Gutiérrez Müller propuso a las investigadoras creer en ellas mismas y fortalecer la autoestima, porque a quienes participan en política o que están vinculadas al ámbito público-político “es una pesadilla enfrentarse a condiciones graves, injustas y poco éticas”.
En su caso, dijo que cada vez le importa menos lo que publiquen medios o periódicos sobre su vida académica. Es molesto en la opinión, actuación o evaluación de su trabajo por parte de los detractores de su esposo, sin mencionar el nombre de Andrés Manuel López Obrador.
“Que si mis logros se los debo a mis supuestas influencias y mi currículo es requerido constantemente por el Instituto Nacional de Transparencia de la universidad y del INAI, buscan con frecuencia mi cédula doctoral y todo de mala fe. Que sigan buscando, nosotros seguiremos respondiendo a los oficios, pero es inaceptable que los comités editoriales y las comisiones dictaminadoras, aun en los concursos por una plaza de tiempo completo, sometan a evaluación nuestras relaciones personales”, agregó.
Añadió que, por esa razón, desde hace años es que decidió publicar fuera de México y a la fecha ha podido constatar que sin problema alguno recibe dictámenes serios que aportan a su trabajo realizado y no se juzgan sus relaciones personales, lo que representa el 72 por ciento de sus publicaciones.
Beatriz Gutiérrez Müller participó en el panel “El Papel de las Mujeres en la Ciencia” junto con las doctoras Dora Barrancos, asesora presidencial en Argentina; Silvia Giorguli Saucedo, presidenta del Colegio de México, y Arianna Becerril, directora ejecutiva de la Red de Revistas Científicas (Redalyc).
Gutiérrez Müller actualmente es investigadora de tiempo completo en el Instituto de Ciencias Sociales y Humanidades de la BUAP y miembro del Sistema de Investigadores del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt).