Enfrentar un accidente vial con o sin seguro puede ser la diferencia de tener un fuerte quebranto en las finanzas personales. De acuerdo con la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), tener un percance de gravedad al momento de conducir es la segunda causa de empobrecimiento en el país.
Según el organismo, al cierre de marzo pasado se registraron 50 mil 404 accidentes viales, un incremento de 17% respecto del mismo mes de 2022.
De acuerdo con la directora general de la AMIS, Norma Alicia Rosas, explicó que un accidente menor, popularmente conocido como laminero, puede alcanzar entre 18 a 25 mil pesos.
“Cuando hablamos de un accidente vehicular mucho más delicado, donde puede haber incluso daños a las personas, daños al otro vehículo, estamos hablando en promedio, pues de 150 mil a 160 mil pesos”, dijo la directiva.
En ese sentido, explicó que si el conductor tiene el seguro, estará la tranquilidad de que alguien va a respaldarlo. En caso contrario, puede caer en un problema financiero mucho más serio.
“Ha habido algunas situaciones en donde, a lo mejor una persona se distrae, se sube a la banqueta, se lleva a un grupo de personas, ahí cuando hablamos de daños catastróficos, pues podría superar lo que nosotros tenemos en promedio, alrededor de los 900 mil pesos”, detalló.
De acuerdo con los datos de la AMIS, solamente 30% del parque vehicular en el país está asegurado, con lo que son necesarias mayores medidas de monitoreo para aumentar la contratación de esta protección financiera, la cual debe tener cobertura de daños a terceros.
“Tenemos que seguir impulsando y tenemos que seguir platicando sobre las ventajas de contar con un seguro de Responsabilidad Civil que tiene que ver con ser un seguro que protege a las víctimas de accidentes viales. esperamos que con todos estos esfuerzos logremos que todos tengan un seguro para proteger a terceros”, añadió.