En el estado de Puebla el sector automotriz es una de las industrias más importantes. Se conforma por las armadoras de autos Volkswagen y Audi, y cerca de 130 empresas proveedoras.
Con la aparición de los primeros contagios por Covid-19 en el año 2020, este sector sufrió cambios como despidos, recorte de personal y ajuste salarial que, a la fecha, no han podido recuperarse.
De acuerdo con cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en el año 2020 se perdieron 39 mil 172 empleos formales en el estado. Tal es el caso de Concepción González, quien se desempeñaba como coordinadora de embarques en Gestamp, empresa dedicada al diseño, desarrollo y fabricación de componentes metálicos para el automóvil.
En entrevista con El Universal Puebla compartió que durante tres años coordinaba las actividades del almacén de producto terminado y del área de embarque para garantizar los pedidos del cliente potencial, que es Volkswagen de México.
Dijo que a su cargo tenía a 24 personas, entre montacarguistas, auxiliares de embarques y seguidores de línea; una plantilla que se fue reduciendo con la aparición del Covid-19 en Puebla, en el 2020.
“Fue a partir del primero de abril cuando la empresa detiene todas las actividades laborables y manda a resguardarse a todo el personal, tanto administrativo como operativo. En ese momento aún no había despidos, la gerencia y dirección de la empresa aún se encontraban en pláticas para tener un plan de acción”, comentó.
La ingeniera de profesión añadió que fue a través de un comunicado que se les informó que la empresa acordó la reducción del salario a 75 por ciento, el cual duraría del 13 al 30 de abril, y que pasado este convenio se regresaría al monto y nivel establecidos en el contrato.
A partir de abril del 2020, además del convenio, cada día comenzaron a registrarse de 3 a 7 despidos; al mismo tiempo que se tomaban medidas para evitar contagios entre los trabajadores que asistían a la planta ubicada en San Lorenzo Almecatla.
“Fue en el verano del 2020 cuando me informan que debido al Covid-19, las operaciones y actividades habituales de la empresa se vieron afectadas, y tomaban la decisión de reducir los puestos de trabajo y rescindir de mi contrato”, compartió.
Agregó que para quienes continuaron trabajando tuvieron que aceptar un segundo convenio, el cual consistió en una nueva reducción salarial de 50 por ciento para personal administrativo y de 75 por ciento para el personal operativo.
“Sé que, a la fecha, los puestos de trabajo que varios compañeros y yo dejamos vacíos aún no se han ocupado, incluso el cliente potencial que es Volkswagen no se ha recuperado de la pandemia. Actualmente en la armadora siguen sin trabajar sus jornadas normales, están bajo el esquema 4X3, es decir, 4 días laborables por 3 de descanso, mismo que seguirán hasta la semana 19, que es a mediados de mayo próximo”, añadió.
Concepción González comentó que toda su carrera laboral se había desarrollado en la industria automotriz, pero ésta ha sido de las más afectadas en Puebla a consecuencia de la pandemia, por lo que tuvo que buscar empleo en la industria de alimentos y emigrar a otro estado.
Narró que durante los meses que permaneció sin empleo, solo encontró apoyos económicos del gobierno federal dirigidos a jóvenes que no estudian ni trabajan, y para las personas de la tercera edad, pero no para la población económicamente activa o que acaban de perder su fuente de ingreso.
El gobernador de Puebla, Miguel Barbosa Huerta, durante la entrega de su Tercer Informe de Labores ante el Congreso local, dio a conocer que su administración destinó más de 4 mil millones de pesos para atender la contingencia sanitaria por Covid-19.