Una de las peculiaridades de la generación Z en materia de consumo es su tendencia a realizar compras en línea. De ahí que sea de interés comprender por qué prefieren el comercio digital en lugar del físico.
En principio, hay que recordar que los integrantes de la generación Z nacieron en un entorno tecnológico donde predomina lo digital, con un marcado énfasis en los hábitos de compra.
Para los integrantes de la generación Z, acudir a un establecimiento físico para realizar compras representa un desafío, ya que rompe con su entorno tecnológico. Sin embargo, en el panorama digital se desenvuelven como peces en el agua, con total soltura y conocimiento del terreno.
Los temores de la generación Z al acudir a tiendas físicas
En general, los integrantes de la generación Z desconocen la forma en la que deben interactuar con el dependiente de un comercio o cómo solicitar un producto determinado.
Además, pueden tener simple temor a las aglomeraciones y a las filas que deben enfrentar en los establecimientos comerciales.
La generación Z no creció acompañando a sus padres a comprar en mercados o tiendas; en el mejor de los casos, acudieron a supermercados, donde todo está empaquetado y las interacciones son mínimas, ya que hasta los precios están indicados.
En gran medida, el impulso al comercio digital, fomentado por jugadores del sector como Mercado Libre y Amazon, sumado a las consecuencias de la pandemia, obligó a las grandes tiendas y comercios a habilitar el comercio digital y los denominados puntos de entrega.
Estos elementos incentivaron en los integrantes de la generación Z, en particular, y en algunos sectores de la sociedad, en general, la preferencia por el comercio digital.
Sin moverse de su zona de confort, los Z pueden comparar precios, evaluar opiniones y tomar decisiones sin interactuar con un vendedor.
Además, tienen la opción de pagar en línea y, bajo ciertas condiciones, realizar cambios o devoluciones si lo consideran necesario.
Pero, sobre todo, pueden recibir los bienes adquiridos sin tener que salir de sus zonas de confort.
