Las cerca de 100 pipas que, desde el pasado lunes 23 de enero, permanecían estacionadas en la terminal de almacenamiento y despacho de Petróleos Mexicanos (Pemex), en el Parque Industrial Puebla 2000, comenzaron a abastecerse de combustible.
Lo anterior, luego de que trabajadores sindicalizados de Pemex terminaron con el paro de labores que mantenían y con el bloqueo que no permitía que las pipas cargaran gasolina y diésel para surtir a las estaciones en Puebla, Tlaxcala e Hidalgo.
Los inconformes levantaron el paro después de que administrativos atendieron sus peticiones de entrega de uniformes, herramientas y equipo de seguridad para desempeñar sus funciones.
Ese fue el compromiso que Pemex firmó en julio del 2022, durante la revisión del Contrato Colectivo de Trabajo, pero que no había cumplido.
Fue poco después de la madrugada de este jueves cuando los conductores de las pipas comenzaron a surtirse de combustible y trasladarse a las gasolineras de Puebla, mismas que ya comenzaban a reportar desabasto para los automovilistas.
La mañana del miércoles 25 de enero, el propio gobernador de Puebla, Sergio Salomón Céspedes Peregrina, aseguró que no había focos rojos en la entidad por el paro de labores de los trabajadores sindicalizados de Pemex.
Sin embargo, Luz María Jiménez Almazán, presidenta de la Asociación de Gasolineros de Puebla y Tlaxcala, en su momento dijo que al menos una docena de gasolineras de ambas entidades presentaban problemas de desabasto de combustible.
Ahora que la terminal de abastecimiento en Puebla comenzó a operar de manera normal, las estaciones de gasolina comienzan a trabajar de forma regular con sus clientes, quienes ya pueden comprar gasolina magna o premium y diésel.