Cada vez que se acude al mercado no deja de sorprender que nuevamente subió el precio del jitomate, del pollo, de los chiles y cebollas, por lo que especialistas en economía recomiendan ser cautos porque los incrementos seguirán dándose en el año 2022.
Anselmo Chávez Capó, catedrático de la Escuela de Administración Financiera y Bursátil de la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), explicó que estos aumentos son resultado de la inflación.
En conferencia, dijo que las familias en México están padeciendo el aumento constante en los precios de los productos de la canasta básica y servicios durante 17 quincenas consecutivas.
El Banco de México fijó un estimado de 3 por ciento de inflación para 2021, pero con el incremento en los precios de los productos se ha llegado a una inflación de 7.05 por ciento en la primera quincena de noviembre, es decir, cuatro índices más de lo estimado.
Dijo que, de seguir este incremento en los precios y de que la inflación esté alcanzando un aumento histórico en los últimos 20 años, es señal de que se avecina un problema grave que se verá reflejado en el bolsillo de los mexicanos.
La inflación también es resultado de toda la problemática mundial que se vive en estos momentos y aunado al problema que sigue provocando la pandemia por Covid-19.
A causa de la pandemia se rompieron las cadenas de producción lo que a la vez provoca que la distribución de bienes y servicios sea menor o se congelen.
Indicó que al romperse las cadenas de producción, han provocado también que las materias primas registren incrementos altos que se ven reflejados en los precios de éstas.
Un tercer elemento es que se dejaron de producir ciertos bienes que permitían la continuación del proceso productivo, como es la escasez por ejemplo de los microchips, y otro elemento que está contribuyendo en el incremento de la inflación es el tipo de cambio del peso mexicano con relación al dólar.
El especialista explicó que desde la llegada del gobierno federal en turno, los incrementos en los bienes y servicios han sido constante hasta la fecha.
Algunos ejemplos son: el precio del arroz subió 77 por ciento, el pollo aumentó 66.67 por ciento de noviembre de 2018 a octubre de 2021, el precio de la carne de res subió 28 por ciento, carne de cerdo en un 41.66 por ciento, en el caso de la leche fue del 48.79 por ciento, crema ácida en un 29 por ciento, el huevo con 66 por ciento, y en los precios de los combustibles 11.73 por ciento.
Lamentó que el gobierno de México “esté solamente concentrado en sus obras prioritarias y está descuidando el nivel de vida de la población en cuanto a promover un mejor bienestar, así como reconsiderar su política en materia de salud con respecto a la vacunación de los ciudadanos y que se pueda ir caminando en la reactivación económica que requiere el país con mayor seguridad y apegados a los protocolos de salud sanitaria”.
La sugerencia a la población es actuar con cautela en el manejo de su bolsillos, ya que se prevé que esta inestabilidad continúe para el año 2022.
