La industria de la construcción, tiene un impacto significativo en la economía de un país, ya que contribuye al empleo, al PIB, al desarrollo urbano y al crecimiento económico, logró un repunte del valor de su producción de 2.5 por ciento mensual en noviembre de 2022, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Para el sector de la construcción esta fue el alza mensual más fuerte desde julio de 2021, con lo que sumó tres meses seguidos con avances.
Sin embargo, la producción de las compañías constructoras del país todavía está 7.8 por ciento por debajo al alcanzado en enero de 2020, previo a la pandemia.
También es 32.2 por ciento menor a su máximo histórico alcanzado en diciembre de 2009, con base en cifras ajustadas por estacionalidad, lo que hace a este sector uno de los más rezagados de la economía.
La industria de la construcción tiene una gran importancia económica, ya que es un motor clave para el crecimiento económico y el desarrollo de un país.
Algunas de las formas en las que la industria de la construcción contribuye a la economía incluyen:
- Generación de empleo: La construcción es una industria laboral intensiva, lo que significa que requiere un gran número de trabajadores para realizar sus proyectos. Esto contribuye a reducir el desempleo y a mejorar el bienestar de las personas.
- Impulso al PIB: La construcción es una industria que requiere un gran volumen de inversión, por lo que su crecimiento y desarrollo contribuye al aumento del PIB.
- Desarrollo urbano: La construcción de infraestructura, viviendas y edificios comerciales y públicos contribuye al desarrollo urbano y mejora la calidad de vida de las personas.
- Crecimiento económico: La construcción también es un catalizador para el crecimiento económico ya que al impulsar el desarrollo urbano, genera nuevos empleos y aumenta el consumo de bienes y servicios.
Impulso al sector manufacturero: La industria de la construcción utiliza una gran cantidad de productos manufacturados, como materiales de construcción, maquinaria y equipos, lo que impulsa el crecimiento de estos sectores.
Por tipo de obra, cinco de los seis grupos que conforman la construcción crecieron durante el penúltimo mes de 2022.
El segmento relacionado con el transporte y la urbanización fue el que observó el mayor aumento mensual, de 5.0 por ciento.
Destaca que este tipo de obras son las segundas con mayor peso, al participar con una quinta parte del valor de la producción de las constructoras del país.
Por su parte, la división de petróleo y petroquímica reportó un aumento mensual de 3.9 por ciento; otras construcciones, 2.5 por ciento; agua, riego y saneamiento, 1.4 por ciento; así como edificación, 0.5 por ciento. Este último segmento es el que tiene una mayor participación en el sector, de alrededor de 40 por ciento.
El único segmento de la producción de las empresas constructoras que reportó una baja fue el de electricidad y comunicaciones, retrocediendo 0.4 por ciento.
