Durante enero y lo que va de febrero, México ha recibido una inversión de 4 mil millones de dólares en la fabricación de componentes automotrices, informó la Industria Nacional de Autopartes (INA).
El organismo señaló que la llegada de capitales es resultado de la resolución favorable para México y Canadá del panel de controversia relativo a las reglas de contenido regional en la fabricación de automóviles del T-MEC.
La industria de autopartes es muy importante para México debido a varias razones:
- Creación de empleo: La industria de autopartes es una de las más grandes generadoras de empleo en México, proporcionando empleos a millones de personas en todo el país.
- Fuente de divisas: La exportación de autopartes es una importante fuente de divisas para México, ya que el país es un importante proveedor de autopartes para el mercado estadounidense y otras economías importantes.
- Contribución al PIB: La industria de autopartes contribuye significativamente al PIB (Producto Interno Bruto) de México, aportando una importante fuente de ingresos y crecimiento económico.
- Desarrollo tecnológico: La industria de autopartes ha impulsado el desarrollo tecnológico en México, ya que las empresas han invertido en la investigación y el desarrollo para mejorar sus productos y procesos.
Alberto Bustamante, director general de INA, dijo en un seminario online que desde el primer semestre del año pasado a la fecha se han invertido casi 15 mil millones de dólares en el sector autopartes.
Como consecuencia de la resolución favorable para México del pánel automotriz, llegron 10 mil millones durante el segundo semestre de 2022 y casi 5 mil millones entre enero y lo que va de febrero.
La mayor parte de las inversiones corresponde a ampliaciones de líneas de producción de empresas que ya se encontraban en el país, pero también de nuevas compañías que están trasladando sus operaciones de Asia a México con miras a exportar libres de arancel hacia Estados Unidos y Canadá.
A esos 15 mil millones de dólares en inversión se suma el anuncio del viernes pasado de BMW, que inyectará 800 millones de euros a su planta de San Luis Potosí para fabricar autos eléctricos y baterías de alto voltaje.
Según la INA, en los últimos cuatro años la relocalización de las empresas hacia México, por país de origen, corresponde en 40 por ciento a China, 20 por ciento a Estados Unidos, 11 por ciento a Japón, 9 por ciento a Alemania, y 8 por ciento a Corea del Sur.
Actualmente existe un mercado potencial de 3 mil 500 millones de dólares en partes, componentes y procesos que los fabricantes de autos están buscando hacer en el país, como fundición a presión, inyección de plástico, estampado metálico de 50 a 5 mil toneladas, ensambles electrónicos, tornillos especiales para la industria, extrusión de aluminio, forja en frío y caliente y maquinados.
René Mendoza, presidente nacional de la Cadena de Proveedores de la Industria Automotriz en México, explicó que las empresas que buscan proveedores de estos componentes y servicios son Ford, Honda, John Deere, BMW, KIA, Magna, Visteon, Lear, Continental, Hitachi, Robert Bosch, Caterpillar, Eaton y Rassini, entre otras.
El 11 de enero la Secretaría de Economía dio a conocer el fallo a favor de México y Canadá en la interpretación de reglas de origen para la fabricación de vehículos ligeros dentro del T-MEC.
El año pasado México tuvo un balance comercial positivo al exportar 79 mil millones de dólares en autopartes, frente a 34 mil millones en importaciones.
La INA estima que la producción de autopartes en el país puede crecer 30 por ciento en 2023.