Recientemente, Tupperware se declaró en bancarrota y se acogió al Capítulo 11 del Tribunal de Quiebras de Estados Unidos, pero ello no significa el cierre ni el despido de sus empleados. Como empresa, tiene una oportunidad para resolver sus problemas financieros y continuar con sus operaciones.

La presidenta y directora ejecutiva de Tupperware Brands Corporation, Laurie Ann Goldman, expresó: “en los últimos años, la posición financiera de la empresa se ha visto gravemente afectada por el difícil entorno macroeconómico”.



Mediante un comunicado, la empresa señaló: “este proceso está diseñado para darnos la flexibilidad necesaria mientras exploramos alternativas estratégicas para completar nuestra transformación en una empresa digital y liderada por tecnología”.


Así, tras confirmar la bancarrota de la empresa, sus directivos esperan reestructurar las deudas y resolver los problemas financieros para poder dar continuidad a sus operaciones.

En esencia, se espera que Tupperware cree nuevas estrategias en el campo del marketing digital para adaptarse a las tendencias actuales de ventas. En consecuencia, la empresa se enfocará en dar continuidad a sus 75 años de historia en el mundo de los recipientes, accesorios y utensilios, en los cuales cuenta con un liderazgo evidente.

En general, se estima que Tupperware no logró adaptarse adecuadamente a las nuevas dinámicas de venta en línea y en tiendas minoristas.



El 17 de septiembre de 2024, Tupperware Brands Corporation anunció la solicitud voluntaria de protección por bancarrota bajo el Capítulo 11 en el Tribunal de Quiebras del Distrito de Delaware. La empresa enfrentó años de declive en sus ventas y una lucha por adaptarse a la modernización del comercio minorista y digital.

Tupperware enfrenta una elevada deuda y había advertido varias veces en los últimos meses sobre su posible bancarrota debido a problemas de liquidez. En esencia, todo indica que habrá que estar atentos ante el eventual resurgimiento de Tupperware.

Google News

TEMAS RELACIONADOS