Con el aval de 12 de los 20 diputados federales de Puebla se aprobó el 5 de noviembre una reforma que compromete fondos con aportaciones de los trabajadores mexicanos en el caso de caídas presupuestales en el gobierno federal.
Es decir que la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) podrá disponer de recursos que antes no podía tocar como los del Instituto Nacional del Fondo de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) y del Fondo de Vivienda del Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (FOVISSSTE).
Entre ellos, activos financieros como depósitos, títulos de deuda a favor del gobierno, participaciones de capital en empresas de participación del Estado, reservas de seguro, rendimientos y cuentas por cobrar.
En contra votaron los cinco representantes del Partido Acción Nacional (PAN), Ana Teresa Aranda Orozco, Carolina Beauregard Martínez, Genoveva Huerta Villegas, Mario Riestra Piña y Humberto Aguilar Coronado, así como Blanca Alcalá Ruiz y Lázaro Jiménez Aquino del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
En todo el Congreso de la Unión hubo además una abstención de la poblana Inés Parra Juárez del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), quien ya había votado contra otras iniciativas del lopezobradorismo.
En total, los votos a favor de los diputados federales fueron 264, hubo otros 217 en contra y la abstención mencionada, para un decreto que ahora será analizado en el Senado.
En el caso del PAN, su bancada criticó que es un intento de la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador por mantener fondos de estabilidad y para financiar sus megaobras.
Mientras que desde Morena se argumentó que es una medida que permite garantizar recursos para esas obras, pero también para los programas sociales del gobierno federal.
