Durante el 2020, año en que se expandió la pandemia de Covid-19, se redujo el número de víctimas del delito, pero 93 de cada 100 hechos no se denuncian, reveló el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Este resultado forma parte de la Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE) 2021 que realiza el INEGI.
La cifra negra, es decir el nivel de delitos no denunciados o denunciados que no derivaron en carpeta de investigación, fue de 93.3% a nivel nacional durante 2020.
La ENVIPE 2021 estima que los principales motivos que llevan a la población víctima de un delito a no denunciar son por circunstancias atribuibles a la autoridad.
Las principales causas por las que los mexicanos no denuncian es por considerarlo como pérdida de tiempo con 33.9% y la desconfianza en la autoridad con 14.2 por ciento.
Se estima en 21.2 millones el número de víctimas de 18 años y más en el país durante 2020, lo cual representa una tasa de prevalencia delictiva de 23 mil 520 víctimas por cada cien mil habitantes, cifra inferior a la estimada en 2019.
El 28.4% de los hogares del país contó con al menos un integrante víctima del delito.
El propósito de esta encuesta es generar información a nivel nacional, por entidad federativa y áreas metropolitanas de interés sobre el fenómeno de la victimización delictiva durante 2020.
También analiza la percepción social respecto de la seguridad pública y el desempeño de las autoridades en el período de marzo y abril de 2021.
La ENVIPE permite hacer estimaciones sobre los delitos de robo total de vehículo, robo parcial de vehículo, robo en casa habitación, robo o asalto en calle o transporte público.
Asimismo, robo en forma distinta a las anteriores (como carterismo, allanamientos con robo en patio o cochera, abigeato), fraude, extorsión, amenazas verbales, lesiones y otros delitos como secuestros y delitos sexuales.
Los delitos como narcotráfico, delincuencia organizada, robo de combustible y trata de personas, entre otros de este tipo, no son susceptibles de medirse en una encuesta de victimización.
Al igual que la edición de 2020, la ENVIPE 2021 incluye como periodo de referencia a la contingencia sanitaria derivada de la pandemia generada por el virus SARS-COV2 y la implementación de medidas oficiales para evitar su propagación.
La ENVIPE estima 21.2 millones de víctimas de 18 años y más, lo cual representa una tasa de prevalencia delictiva de 23 mil 520 víctimas por cada cien mil habitantes durante 2020.
La tasa de incidencia delictiva por cada cien mil habitantes en 2020 fue de 30 mil 601, cifra estadísticamente menor a la estimada en 2019 que fue de 33 mil 659.
El delito de robo en la calle o transporte público presentó una reducción en su frecuencia, al pasar de 27 por ciento del total de los delitos ocurridos durante 2019 a 22.5 por ciento en 2020.
En 2020, el costo total a consecuencia de la inseguridad y el delito en hogares representó un monto de 277.6 mil millones de pesos, que representa 1.85% del PIB.
El monto de los daños equivale a un promedio de 7 mil 155 pesos por persona afectada por la inseguridad y el delito.
La percepción de inseguridad de la población de 18 años y más en las entidades federativas en marzo y abril de 2021 se ubicó en 75.6 por ciento.
Durante el mismo periodo, la sensación de inseguridad en los ámbitos más próximos a las personas fue de 65.5 por ciento en su municipio o demarcación territorial y 41.9 por ciento en su colonia o localidad.
Dichas estimaciones fueron estadísticamente menores a las registradas en 2020.