En el norte de la ciudad de México se encuentra el barrio de Cuautepec Barrio Alto, una colonia de escasos recursos situada a lo alto de una loma donde cientos de personas se trasladan diariamente en vochotaxis, un transporte público informal de automóviles del modelo Volkswagen Sedan.

Vocho, o vochito, es el nombre que se le dio en México al Volkswagen Sedán, que se fabricó en la planta de Puebla de la armadora alemana entre 1964 y 2003.

Sin cromática que los distinga, algunas unidades se encuentran en estado físico descuidado, sin taxímetro ni tarifa autorizada.

Los Volkswagen Sedán se ven de manera frecuente en los alrededores del Reclusorio Norte, Cuautepec Barrio Alto, Ticomán, y son utilizados principalmente para realizar viajes cortos.

La Secretaría de Movilidad capitalina (Semovi) estima que hay más de mil 500 unidades, que se concentran en 70 puntos de la alcaldía Gustavo A. Madero.

La tarifa es de 25 pesos, que puede aumentar de acuerdo con la distancia de los viajes.

Los vochotaxis cubren una demanda de transporte que ni los taxis concesionados ni los vehículos de Uber cubren, debido a las dificultades que presenta la topografía de la zona.

Los vochotaxis se encuentran en un proceso de regularización por parte de las autoridades de Transporte de la Ciudad de México, dentro del cual se realiza un censo de estos vehículos.

Los vochotaxis sólo realizan viajes de corta distancia, sin salir de Cuautepec. Su tracción trasera les permite subir las inclinadas pendientes, y sus dimensiones compactas les permiten acceder a las zonas angostas de las calles de Cuautepec el Alto.

Los días de tianguis realizan servicios locales desde las estaciones Deportivo 18 de Marzo y hacia el poniente del Metro Pantitlán y la Raza.

“Esas chatarritas nos suben, son los que se animan a ir hasta allá”, dijo a EL UNIVERSAL Mariana Pedrajo al referirse al vochotaxi que utiliza todos los días para tras- ladarse en la zona de Cuautepec Barrio Alto, donde hay pendientes pronunciadas.

El auto del pueblo

En un inicio el automóvil fue diseñado para convertirse en el auto para el pueblo alemán, seguro, eficiente y sobre todo, muy económico.

Originalmente recibió el nombre de Volkswagen Type 1, mismo que conservó por muchos años en el territorio europeo.

Muchos pensarían que el nombre de Vocho viene de la contracción de la firma alemana y otros más podrían decir que, gracias a la gran cercanía que se tuvo en nuestro país, fue un apodo dado en forma de cariño y que trascendió fronteras.

Una de las teorías es que el nombre del Vocho surgió de la costumbre mexicana por contraer nombres, resultando así como un diminutivo de Volkswagen.

Una segunda teoría apunta a que durante las guerras mundiales de Europa, los franceses llamaban a los alemanes con el apodo de “boches”, por lo que los mexicanos habrían derivado de esta palabra el apodo al vehículo.

La idea inicial del Volkswagen, producido en 1938 hasta 2003, iba encaminada a la producción de un automóvil que fuera asequible para la gran mayoría del pueblo alemán. Asimismo, el primer auto se le denominó como KdF-Wagen, Kraft durch Freude Wagen, (Fuerza a través de la alegría).

Al término de la Segunda Guerra Mundial y con pocos ejemplares producidos, el KdF-Wagen llegó a tierras norteamericanas, recibiendo el nombre de “Volkswagen Beetle”, debido a que su carrocería se parecía mucho a la de un pequeño escarabajo

No fue hasta 1964 en que la empresa alemana se consolidó en México, exactamente en la planta más importante de Puebla, y se comenzaría a fabricar el famoso “Escarabajo''. Existe la leyenda de que, acostumbrados a contraer palabras, se le fue nombrando “Vocho” a manera de diminutivo.

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