En enero de 1993, después de dos décadas de hiperinflación en el país, el Banco de México (Banxico) lanzó a la circulación los Nuevos Pesos, una nueva unidad monetaria a la que se le retiraron tres decimales para facilitar las transacciones monetarias.
Entre las monedas que debutaron con la nueva unidad monetaria estuvo la moneda de 20 pesos con la efigie de Miguel Hidalgo y Costilla, con la particularidad de ser bimetálica, con un anillo perimétrico de bronce-aluminio y un centro de plata, ley 0.925.
La forma de esta moneda es circular, de 3.2 centímetros de diámetro, con un peso de 16.996 gramos y estriado discontinuo en su canto.
Aunque su valor actual es equivalente a su denominación, de 20 pesos, es un ejemplar escaso que entre coleccionistas se puede encontrar en un promedio de 500 pesos.
No obstante, EL UNIVERSAL PUEBLA encontró cotizaciones en portales de comercio electrónico que tasan esta moneda con un valor de mercado de hasta 20 mil pesos.
Los billetes y monedas marcados con la leyenda de Nuevos Pesos se encuentran en proceso de retiro de circulación, aunque siguen siendo válidos para realizar compras y pagos.
El 22 de junio de 1992, el entonces presidente Carlos Salinas de Gortari decretó la sustitución de los billetes y monedas del Banxico por el Nuevo Peso, que se convirtió en la moneda de curso legal a partir del 1 de enero de 1993.
Todos los billetes y monedas que comenzaron a circular contenían la expresión "Nuevos Pesos" o el símbolo "N$".
Los Nuevos Pesos incorporaron por primera vez en México las monedas bimetálicas, que en el mundo ya se utilizaban como en el caso del Euro; las monedas del país continúan utilizando esa característica hasta la actualidad, aunque sin el uso de la plata.
Para su sustitución, el Banxico)los recibe con un valor equivalente a su denominación, y se pueden cambiar a través de la red de sucursales bancarias, así como en centros de canje bajo ciertas reglas.
En la última serie monetaria anterior a 1992 se habían emitido monedas con denominaciones de un centavo hasta 5 mil pesos, y se imprimieron billetes de hasta 100 mil pesos por la pérdida de poder de compra de la moneda mexicana.
Con la emisión de los nuevos pesos se retiraron tres dígitos a los precios de productos y servicios en la economía mexicana, que se valoraban en miles de pesos, tras las tasas de inflación de hasta 160 por ciento que se registraron a partir de la década de 1970.
Las monedas de centavos estaban inspiradas en la Piedra del Sol: La moneda de 5 centavos tenía en su anverso una estilización de los rayos solares del Anillo de los Quincunces, la de 10 centavos el Anillo del Sacrificio, la de 20 centavos un detalle del Acatl, Décimo Tercer Día, y la de 50 centavos el anillo exterior del también llamado Calendario Azteca.
El monolito azteca también inspiró el grabado de las monedas de mayor circulación, la de 1 Nuevo Peso tenía en el perímetro el Anillo del Resplandor de la Piedra del Sol, la de 2 Nuevos Pesos en Anillo de los Días, la de 5 Nuevos Pesos el Anillo de las Serpientes, y la de 10 Nuevos Pesos el grabado completo de la Piedra del Sol en su centro de metal color plateado.
En cuanto a las monedas de mayor valor, la de 20 Nuevos Pesos presentaba un perfil de Miguel Hidalgo y Costilla, y la de 50 Nuevos Pesos a los Niños Héroes del Castillo de Chapultepec.
Los billetes se imprimieron en denominaciones de 10, 20, 50 y 100 Nuevos Pesos, con las imágenes de Lázaro Cárdenas, Andrés Quintana Roo, Cuauhtémoc y Plutarco Elías Calles, respectivamente.
Los Nuevos Pesos se utilizaron hasta 1996, cuando se consideró desmonetizado el llamado viejo peso.
A partir del 3 de octubre de 1994, el Banco de México comenzó a poner en circulación a la Familia C de Billetes y Monedas, que eliminaron el término y el símbolo de los Nuevos Pesos.