Desde hace cinco años se ha popularizado el término de la tortilla pirata, un producto básico en nuestra alimentación, pero que se ha deformado por su mala calidad, pero ¿cómo saber si también la venden en las tortillerías de Puebla?
La definición de ese tipo de alimentos varía según la percepción de organizaciones nacionales enfocadas al maíz. Sin embargo, hay algo en lo que coinciden y es que pueden ser baratas, pero de menor calidad e incluso, representan un riesgo para los consumidores.
¿Cuáles son las tortillas piratas?
El organismo que asegura haber iniciado con el término de las tortillas piratas es el Consejo Rector de la Tortilla Tradicional Mexicana. Desde su perspectiva son alimentos de mala calidad que se ofrecen al consumidor con precios más baratos de lo que marca el promedio del mercado.
Las razones para vender tortillas más económicas tienen detrás factores como utilizar ingredientes no idóneos y que los comercializan empresas informales.
Son informales los negocios que no cumplen con los requisitos básicos para abrir cualquier negocio en México y que tampoco siguen las medidas de salubridad dictadas por las autoridades.
El término de las tortillas piratas también se ha utilizado para identificar a las piezas que se producen con olote y otros residuos que genera el maíz, por lo que tienen un aspecto gris y sabor distinto.
¿Cómo identificar una buena tortilla en Puebla?
En el territorio poblano tiene presencia la Cámara de la Industria de Masa y Tortilla Tlaxcala, Puebla y Veracruz, la cual sigue de cerca la calidad de los productos que se comercializan.
En entrevista con El Universal Puebla, el delegado regional Ismael Ávila Briteño señala cómo hacen frente a este tema de las tortillas piratas y a las malas prácticas en general.
Desde su perspectiva, las que se clasifican como piratas son las que utilizan el olote y otros residuos del maíz. Mientras que en otra categoría clasificaría a las que tienen un origen insalubre e inseguro que pueden generar enfermedades por bacterias.
Además de los precios más bajos que pueden tener las tortillas irregulares, él advierte al menos seis cosas que se deben observar al comprar tortillas en Puebla.
- Saber de dónde viene la tortilla que te comes, pues a veces se comercializa en tiendas de varios productos y no se conoce al proveedor.
- Si es una tortillería, el mostrador debe ser de acero inoxidable para cumplir con las normas básicas que se exigen a estos negocios.
- Que el local luzca limpio, ya que eso habla de la calidad que tendrá el producto que te llevarás a la mesa.
- Que el espacio cuente con baño y lavamanos, pues se asegura que hubo un manejo salubre de las tortillas.
- El color de la tortilla debe ser cremoso, no amarilla ni blanca ya que eso hablaría de que pudieron utilizar materiales como la cal que incluso llega a emplearse para la construcción y el apto para consumo humano.
- Que tenga buen olor, sabor y textura, ya que en esos tres aspectos se podría identificar si se utilizó algún material en mal estado.
Al final, comenta el representante del sector, se debe de tomar en cuenta que a diferencia de otros alimentos que puedes lavar después de comprarlos en la calle, las tortillas van directo a la boca.
"La tortilla es un alimento y eso se lo comento a todo el mundo, es un alimento que no puedes llegar a tu casa, lavarlo y después comértelo. No, es un producto que llega y de la máquina va a las manos del que despacha y del que despacha, va a tu boca", explicó.
Según estimaciones de la cámara que representa Ismael Ávila, en México debe haber unos 100 mil puntos de venta de tortillas y hasta 2023 en el estado de Puebla había unos 10 mil.
Parte de su trabajo como organización es capacitar a las tortillerías
para que garanticen un producto de calidad al consumidor. Sin embargo, también se mantienen con exigencias hacia las autoridades municipales y estatales que tienen que hacer cumplir normas que van desde la protección civil hasta la salubridad.
