Un Centenario de oro es una moneda codiciada por coleccionistas y buscada también por aquellos que quieren invertir en este metal precioso que es utilizado como reserva de valor, pero también como pieza de joyería.
El Centenario es una "bullion", término que reciben las monedas de inversión acuñadas en metales preciosos, más preciadas a nivel mundial.
En Instagram es posible encontrar varias joyerías en Estados Unidos que emplean el Centenario de oro mexicano para crear medallones cuyo estilo es innevitablemente buchón.
En la siguiente imagen, por ejemplo, el diseño del medallón incluye un Centenario rodeado de una greca que evoca al emblema de la casa de moda italiana Versace.
Para las personas que buscan un poco más de brillo, existe este otro diseño que incluye una corona de laurel y un bisel de diamantes en torno a la moneda de oro mexicana.
Este medallón incluye el bisel de diamantes, pero la corona que rodea al Centenario tiene un diseño naturalista.
Esta pieza es quizá de las más llamativas en la "joyería buchona". Incluye los tres colores patrios en incrustraciones de esmeralda, diamante y rubí.
El Centenario es sostenido sobre las alas desplegadas de un águila, también uno de los símbolos nacionales. Esta pieza se cotiza en aproximadamente 4 mil 500 dólares.
Otras joyerías ofrecen portacentenarios, para lo coleccionistas que desean colgarse y llevar consigo sus monedas de colección.
Tampoco faltan las piezas de imitación, que sin ser Centenarios reales recrean el diseño de esta moneda mexicana en oro laminado.
Se acuñó por primera vez en 1921, como parte de las celebraciones del primer Centenario de la Independencia de México. Algunas otras monedas de oro del mundo tienen menos de 40 años de historia.
Por ejemplo, el Krugerrand de Sudáfrica es considerada la moneda de oro de inversión más preciada; se acuña en la Rand Refinery en Germiston, cerca de Johannesburgo, desde 1967.
El diseñador fue Jorge Enciso, y el grabado corrió a cuenta de Emilio del Moral, ambos experimentados grabadores y diseñadores activos desde finales del siglo XIX.
Presenta en su lado anverso una imagen del Escudo Nacional, en una representación que fue empleada en el pasado.
En el reverso, la moneda de oro tiene la imagen de una Victoria Alada, que los mexicanos conocemos coloquialmente como el Ángel de la Independencia.
Detrás del Ángel de la Independencia, se observan las siluetas de los volcanes Iztaccíhuatl y Popocatépetl. Además, la pieza acuñada en oro puro lleva inscritos los años 1821 y 1947.