Aunque la inflación en México desaceleró ligeramente su marcha durante el mes de mayo, luego de tres meses consecutivos con tasas anuales al alza, los alimentos siguen encabezando el incremento de los precios de acuerdo con los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El Índice Nacional de Precios al Consumidor creció 0.18 por ciento en mayo respecto al mes anterior, su tasa mensual más baja desde noviembre de 2020.
Con este resultado, la inflación general anual se ubicó en 7.65 por ciento, cifra ligeramente inferior al 7.68 por ciento reportada en abril de 2022.
Pese a lo anterior, “las presiones inflacionarias importadas ante las disrupciones en las cadenas de suministro y escasez de insumos claves persisten, pues el INEGI informó esta mañana que los precios productor de bienes intermedios de las actividades secundarias aumentaron 17.85 por ciento en mayo”, comentó el subgobernador del Banco de México, Jonathan Heath en su cuenta de twitter.
Bienes y servicios que incidieron más en la inflación
Entre los bienes y servicios cuyo incremento de precios incidieron más en la inflación, siguen destacando los casos de frutas y verduras como el aguacate con aumento anual de 83.09 por ciento; chile poblano, 55.75 por ciento; naranja, 18.40 por ciento; chayote, 17.21 por ciento; naranja, así como la papa y otros tubérculos, 16.86 por ciento.
Mercancías alimenticias que se vieron afectados por el alza internacional del maíz y el trigo debido al conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, fueron: harinas de trigo, con un aumento anual de 23.51 por ciento; el pan blanco, 21.91 por ciento; pan de caja, 17.06 por ciento; masa y harina de maíz, 16.21 por ciento; y tortilla de maíz, 15.65 por ciento.
Los productos pecuarios con mayor incremento en mayo fueron: la carne de res con un alza anual de 16.04 por ciento; pescado, 15.16 por ciento; pollo, 12.97 por ciento; y huevo, 13.20 por ciento. Entre los alimentos también destaca el aumento de aceites y grasas vegetales comestibles con una tasa de 35.11 por ciento.
El alza en materia de energéticos la sigue encabezando el gas natural doméstico con un aumento anual de 17.77 por ciento; en tanto que la gasolina premium y regular registraron un incremento de 7.58 por ciento y 6.81 por ciento respectivamente, resultado de los altos precios internacionales del petróleo y pese al subsidio gubernamental.
El constante aumento del índice de precios subyacente, que incluye los bienes y servicios cuyos precios son menos volátiles, sigue preocupando a las autoridades como a los especialistas, debido a que es la parte más inflexible de la inflación.
Dicho indicador tuvo un aumento de 0.59 por ciento mensual y de 7.28 por ciento anual, con lo que liga 18 meses al alza, y se ubica en su nivel más alto desde diciembre del 2000, cuando llegó a 7.85 por ciento. Al interior del índice subyacente, a tasa anual, los precios de las mercancías crecieron 9.53 por ciento y los de los servicios 4.74 por ciento.
Por su parte, el índice de precios no subyacente retrocedió 1.02 por ciento a tasa mensual y la tasa anual aumentó 8.77 por ciento; cifra inferior al 9.07 por ciento reportado en abril.
Dentro del índice no subyacente, a tasa mensual, los precios de los productos agropecuarios subieron 0.78 por ciento y los de energéticos y tarifas autorizadas por el gobierno disminuyeron 2.47 por ciento. Esto se debe principalmente a los ajustes en las tarifas eléctricas dentro del esquema de temporada cálida en 11 ciudades del país.