La pandemia por Covid-19 ha sido catastrófica para la mayoría de negocios; sin embargo, aún en medio de la crisis, la nobleza de muchos está a la vista.
Eloy López Cortés es dueño de la alquiladora Jessica, ubicada en la 6 oriente 1412, en el Barrio de El Alto, uno de los más populares de la capital de Puebla. Su comercio se vio severamente afectado, pues las actividades relacionadas con servicios de banquetes y alquiler de mobiliario para fiestas están completamente paralizadas.
La situación no impidió que desde el inicio de la contingencia sanitaria brindara una ayuda -pequeña pero significativa- obsequiando comida a quienes lo requieren.
Aprovechando sus instalaciones, utensilios y mano de obra, el señor prepara menús para compartir con vecinos del barrio y otros más que, al enterarse del buen gesto, acuden al sitio.
El próximo 25 de marzo, Eloy cumplirá exactamente un año de donar alimentos a personas en situación de vulnerabilidad, principalmente adultos mayores o en situación de calle. Este jueves, por ejemplo, elaboró 400 chanclas poblanas.
A lo largo de 12 meses de pandemia, ha contabilizado 4 mil 400 beneficiarios; en promedio apoya a 370 personas cada mes con una comida caliente que reconforta el hambre y el ánimo ante la crisis sanitaria más dramática de los últimos años.
Gracias a las donaciones de otros ciudadanos que colaboran con insumos y abarrotes a granel o en pequeñas porciones es como ha podido compartir con los demás, por lo cual siempre hace un atento llamado a quienes estén en posibilidad de hacerlo a acudir a su local.
Cabe recordar que el último decreto emitido por el gobierno del estado, con vigencia al 29 de marzo de 2021, mantiene la restricción para la operación de salones para eventos, realización de banquetes y servicio en alquiladoras de equipo para reuniones sociales.
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