¿Sabías que en Puebla hubo una vez una montaña rusa? así como lo lees, en 1890 en la capital poblana existía una montaña rusa que llegó a ser parte de Tívoli, un espacio recreativo para los poblanos.
De acuerdo con la “Guía 4 Épocas, 85 Lugares para conocer Puebla”, una de las huertas del convento de San Francisco pasó a ser propiedad de García de Aguilar, soldado de Hernán Cortés quien fue luego alcalde mayor de Puebla.
Es en esta zona conocida como el “Estanque de los Pescaditos”, se colocaron diferentes atractivos turísticos, como lo fue la plaza de toros (1883) y un Tívoli con establecimientos recreativos como manantiales, fuentes y una montaña rusa.
El Tívoli de San Francisco fue el mejor de la ciudad en esa época, teniendo entradas por el Puente de San Francisco y Río de la Madre (actual 4 Oriente).
Esta zona recreativa estuvo vigente a finales del siglo XIX y principios del siglo XX. Además de la montaña rusa, había otro tipo de juegos, como caballitos de madera, un lago con canoas, juego de bolos, bailes, columpios y otras diversiones.
Aunque no se conoce la altura de la montaña rusa, se sabe que fue trasladada por mulas hasta convento de San Francisco Puebla.
Sin embargo, en el siglo XX, cuando el lugar pasó a formar parte de la Fábrica Textil La Violeta, el lago se secó y se transformó en un jardín.
En la década de los 80 también existió otra montaña rusa en Puebla llamada Boomerang. Esta estructura fue elaborada por una compañía holandesa y colocada en el parque Rafaela Padilla de Zaragoza.
De acuerdo con los comentarios de los internautas, este juego electromecánico tenía un costo de 400 pesos de ese entonces y funcionaba de martes a domingo.
Se dice que en 1988, ante la baja afluencia de visitantes, este juego electromecánico fue vendido a Reino Aventura (actualmente Six Flags).