Los habitantes de la junta auxiliar de San Miguel Canoa enfrentan el desabasto de agua, desde hace casi un año, por un adeudo de 12 millones de pesos a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), que no ha sido cubierto por el Comité de Agua Potable de esa comunidad.
Ello generó una crisis, en la que la autoridad del municipio de Puebla no tiene injerencia, y en cuya solución, de acuerdo con el alcalde Eduardo Rivera Pérez, solo puede fungir como intermediaria.
Por lo que se descartó la posibilidad de que el ayuntamiento cubra el adeudo, porque ello implicaría desviar recursos.
Subrayó que el Comité de Agua Potable que preside Primitivo Arce Luna tiene la responsabilidad, con la comunidad de más de 30 mil habitantes, de solventar el adeudo.
El 5 de diciembre del año 2022, el presidente del Comité de Agua Potable de San Miguel Canoa, debido a que el pasivo es impagable, pidió públicamente a la CFE “borrón y cuenta nueva”, respecto al adeudo económico que derivó en un corte del suministro de energía que impide la operación de tres pozos en la comunidad.
San Miguel Canoa suma 11 meses sin el vital líquido, por lo que de acuerdo con integrantes del Comité de Agua Potable se han comenzado a presentar problemas de salud, como un brote de hepatitis en una primaria.
Ante la carencia de agua, los habitantes de San Miguel Canoa consumen el líquido disponible en un jagüey al norte del municipio.
Además, no son pocos los habitantes que adquieren el agua mediante pipas, lo que representa un gasto oneroso.
En el mes de septiembre del año 2022, el edil auxiliar Ruperto Pérez Lima señaló que se había conformado un nuevo Comité del Agua para tratar de resolver este conflicto con apoyo del Ayuntamiento de Puebla.
Y comentó que la administración municipal apoyaría a la población para equipar dos pozos que no han sido terminados. Lo anterior, mientras los ciudadanos se organizan para cubrir el pasivo con la paraestatal para restablecer el servicio.