Con más de 30 años de existencia, el Salón Country ha sido el espacio que muchas familias poblanas han rentado para celebrar sus eventos como bodas, primeras comuniones o bautizos.
Al mismo tiempo, este recinto ubicado en la Avenida San Ignacio número 824, esquina con Río Lerma, en la colonia San Manuel, ha sido protagonista de escándalos y trifulcas.
El viernes 4 de noviembre se registró el hecho más reciente. Primero, los vecinos llamaron al 911 para pedir el apoyo de las patrullas de vialidad a fin de que agilizaran la circulación en la zona.
El caos se originó porque varios automovilistas se formaron en doble fila, algunos otros bloquearon las cocheras de los colonos y otros más circulaban a vuelta de rueda mientras los taxis bajaban a sus ocupantes para ingresar al salón.
Halloween by Cabritos fue el motivo de la presencia de tantos jóvenes, principalmente de nivel preparatoria, quienes asistieron a este salón que tiene una capacidad para 5 mil personas.
El segundo momento viral de ese día se dio a conocer luego de que en redes sociales se difundieron videos de jóvenes intoxicados presuntamente por el consumo de bebidas alcohólicas adulteradas que se vendieron durante la fiesta.
Este hecho provocó que el propio gobernador de Puebla ordenara la revisión de los reglamentos para regular el funcionamiento de los salones de fiesta.
A lo largo de tres décadas, el Salón Country ha enmarcado bailes, graduaciones, fiestas temáticas, congresos, convenciones, exposiciones, conciertos, premiaciones, sorteos, fiestas institucionales, corporativas, sindicales y políticos, pero también otros escándalos.
El 17 de mayo de 2021 se vivió un zafarrancho donde se vieron involucrados militantes del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) durante la visita del dirigente nacional Mario Delgado, a quien los presentes le gritaron “traidor”.
Fueron consejeros de Morena y brigadistas identificados con la ex presidenta municipal de Puebla, Claudia Rivera Vivanco, quienes reventaron la asamblea, como muestra de rechazo a la imposición de candidaturas en el estado.
Una trifulca más se presentó en noviembre de 2013, cuando cientos de fans de la banda española Mago de Oz compraron boletos para presenciar su concierto anunciado en el Salón Country, pero nunca llegó.
Resulta que el evento estaba programado a las 21:00 horas del 24 de noviembre y los seguidores llegaron desde las 17:00 horas cuando se abrieron las puertas con músicos invitados.
Un grupo musical, encargado de abrir el concierto, cumplió con su papel y prendió a los asistentes para poder disfrutar de la banda española, pero una vez que concluyeron su participación y ya entrada la noche, los organizadores anunciaron que la presentación se suspendía.
La molestia no se hizo esperar, pues llegaron seguidores de Puebla, Tlaxcala, Hidalgo y Estado de México, quienes también invirtieron en comida, hotel, pago de estacionamiento y 20 pesos extra a cambio de que les guardaran cinturones y celulares, pues estaba prohibido el uso de cámaras durante el concierto.
Por la trifulca tuvieron que llegar más de 30 patrullas de la policía municipal y estatal, pero solo para verificar que los asistentes abandonaran el lugar y no hubo detenidos.
Entre los vecinos de San Manuel se menciona que desde que el salón de fiestas entró en funcionamiento hubo familias que tuvieron que vender sus propiedades para comprar casa en otra zona.
Las llamadas a la Policía Municipal han sido constantes para solicitar que pongan orden, pues el ruido de la música y escándalos de borrachos también son el pan nuestro de cada día, siempre que los administradores del salón organizan una fiesta o lo rentan a terceros.