Este fin de semana, un estacionamiento ubicado a un costado del Congreso del estado causó polémica, pues un vehículo fue robado por una persona que argumentó que había perdido el boleto.
Sin embargo, el extravío de los tickets de estacionamiento es una situación prevista en el Código Reglamentario para el Municipio de Puebla (Coremun).
La normativa prevé obligaciones de los prestadores de este tipo de servicios para contar con las licencias de refrendo por parte de la autoridad municipal.
La regla para los boletos perdidos, sin embargo, solo menciona que se debe comprobar la propiedad del vehículo para permitir su salida, aunque no especifica cómo.
"Si los usuarios extravían el boleto, deberán comprobar la propiedad del vehículo a satisfacción del encargado del estacionamiento público, sin cargo económico adicional", indica el Coremun.
En la práctica, algunos establecimientos como el del Centro Comercial San Francisco o los de la zona de la avenida Juárez establecen mecanismos para verificar la propiedad cuando se pierde el boleto.
Esto, al documentar y contrastar la información para identificar el vehículo con la tarjeta de circulación y la información de alguna identificación del usuario.
En general, el Coremun plantea más de 20 obligaciones para los encargados de estacionamientos que garantizan la prestación del servicio en condiciones idóneas.
Las mismas van desde apegarse a las leyes locales vigentes, mantener higiene y seguridad, contar con espacios preferenciales para personas con alguna discapacidad, así como tener una póliza de seguro vigente contra robo total, daños y responsabilidad civil que apruebe el ayuntamiento.
Las reglas también prevén que los prestadores de servicio se hagan responsables de objetos que se hayan dejado al interior del vehículo y hayan sido notificados por un constancia e inventariado.
Asimismo, es una obligación expedir un boleto con datos del servicio, expedir factura si es necesario y mantener identificado a su personal, entre otros aspectos.
