Seguramente has pasado por la Catedral de Puebla y has visto todas las puertas abiertas, a excepción de una, que según la creencia se abre una sola vez al año, y los que pasen por ella pueden obtener la indulgencia plenaria.

Pero de dónde surge esta tradición y por qué es importante  para los devotos poblanos.

La Catedral de Puebla, cuyo nombre original es Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, es uno de los inmuebles más relevantes de la ciudad, declarado patrimonio de la humanidad.

De acuerdo con la página México es Cultura, el exterior de la catedral mide 97.67 metros de largo por 51 metros de ancho, se encuentra trazada en cruz griega y está colocada en la misma posición cardinal que la de San Pedro en Roma; al oriente el altar de los Reyes, al norte la portada real, al sur una portada sencilla sin adorno alguno y al poniente la entrada principal llamada del perdón o papal.

Esta última consagrada en 1649 por Juan de Palafox y Mendoza, fue encomendada al arquitecto Francisco Gutiérrez y realizada por el maestro cantero y escultor Vicencio Varrocio Escayola.

Como la mayoría de las obras arquitectónicas de nuestro país, tiene su origen en Europa, ya que habitual verlas en principales templos y catedrales.

Su nombre está relacionado con la concesión de indulgencias y perdón de los pecados en determinadas celebraciones, romerías, procesiones o festividades.

Este rito era importante porque así los cristianos, al pasar por dicha entrada, se sentían perdonados y purificados para su encuentro con Dios.

De acuerdo con historiadores, hay varias teorías de su origen, pero la más popular señala que fue el papa Alejandro VI quien con motivo del Año Santo romano de 1500 crea la Puerta Santa, o del Perdón, de la Basílica de San Pedro.

Además, instituyó un ritual que debería hacerse de la siguiente forma:

Durante la ceremonia de apertura, mientras el coro cantaba, el pontífice golpeaba la puerta tres veces con un martillo para que se abriera y, tras la retirada de los escombros, el papa sería el primero en cruzarla.

El martillo para derribar la tapia de la puerta, se ha interpretado como un ejemplo de lo que un cristiano debía hacer para abrir la puerta celestial con esfuerzo y decisión.

Estas puertas santas las puedes encontrar en ciudades de España como Santiago de Compostela, Sevilla, Córdoba, Toledo, sin en cambio  en México, la más relevante es la que se encuentra en la Catedral de Puebla, que se abre únicamente en año de indulgencias.

Es decir, la Puerta del Perdón solamente se abre cada 25 años con ocasión del Año Jubilar, además cuando toma posesión un arzobispo o muere, es abierta de par en par.

Cabe señalar que en la puerta del perdón de la Catedral se adorna en esta Semana Santa, puesto que la procesión del Viernes Santo culminará en la explanada de la Catedral.

Si decides visitar esta puerta, te darás cuenta de que a los lados están las esculturas de San Pedro y San Pablo, además de una inscripción en la fachada que dice que la ornamentación de la Puerta del Perdón fue concluida en 1664.

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