Los poblanos, entre semana o fin de semana, gustan de buscar tiempo para el entretenimiento, pero también desean tener opciones para la comida o antojos, realizar la compra de la despensa y hasta pagar algunos trámites, por lo que acuden a las plazas comerciales.
Hay centros comerciales que son los favoritos, otros más concurridos por su posición geográfica, pero existen muchas otras que lucen abandonadas o como plazas fantasmas que cuentan con uno que otro local abierto y completamente cerrados.
¿Qué es una plaza comercial?
Se trata de espacios donde las personas pueden realizar sus compras de todo tipo, ya que cuentan con varios locales donde se pueden adquirir diversos productos como ropa, zapatos, accesorios, muebles, aparatos electrónicos, comida, cafeterías, cosméticos, joyería, gimnasios y salas de cine, entre otros productos y servicios.
Los centros comerciales, por lo general, son construcciones grandes de más de dos niveles, algunos con escaleras eléctricas, rampas y elevadores, con amplios pasillos y desde algunos cajones de estacionamiento hasta niveles subterráneos o superiores para cientos de vehículos.
Los diseños son atractivos y modernos para concentrar grandes cantidades de clientes y se fomentan distintos tipos de consumo, ocio y entretenimiento, gastronomía, vestimenta, entre muchos otros.
¿Cuáles son las plazas fantasmas o abandonadas en Puebla?
Las plazas comerciales tienen como ventaja que muchas tiendas se encuentran concentradas en un mismo entorno, unas junto a otras, lo que permite que los clientes puedan llevar a cabo distintos tipos de compras y contrataciones sin tener que volver a la calle.
Tristemente, en Puebla cada vez lucen más plazas comerciales abandonadas, algunas que abarcan apenas unos cuantos metros, principalmente en las esquinas de algunas calles, donde los ventanales están rotos, las paredes llenas de grafitis, los suelos llenos de basura y desechos, y los barandales o puertas y ventanas oxidándose.
Esta escena se repite en algunas plazas comerciales que, años atrás, fueron toda una novedad y atrajeron a cientos de clientes todos los días, pero hoy lucen abandonadas, en ruinas y como morada de personas en condición de calle.
Algunas de estas plazas que en redes sociales describen como abandonadas son:
- Plaza Pabellón Las Torres, ubicada en Bulevar Municipio Libre número 1972, al sur de la ciudad de Puebla.
- Plaza Platino, ubicada en la Avenida 14 Sur y la 43 Oriente, en la colonia San Manuel.
- Plaza América, en Circuito Juan Pablo II número 505, colonia Tres Cerritos.
- Centro Comercial El Campanario, en la calle 44 Norte, a un costado del mercado Morelos, al oriente de la ciudad de Puebla.
- Plaza El Triángulo, en Bulevar Atlixco y Circuito Juan Pablo II.
Causas por las que están abandonadas las plazas comerciales en Puebla
De acuerdo con comentarios de usuarios en redes sociales, antes de la pandemia estos espacios eran concurridos o, por lo menos, todos los locales estaban ocupados. Sin embargo, tras el confinamiento social, muchos tuvieron que cerrar y otros no se adaptaron a la venta de sus productos en línea.
También comentaron que el incremento de la renta de los locales es elevado y, después de la pandemia, muchos locatarios no han podido reponerse. Como ejemplo citaron que, en el caso de Plaza Las Torres, la renta de los locales es de 35 mil pesos mensuales, cuando existen otros lugares como Plaza Dorada, donde el alquiler es de 20 mil pesos mensuales en promedio.
La ubicación de las plazas comerciales y la cercanía de rutas de transporte público ayudan a que los consumidores visiten más plazas que otras, como en el caso de Dorada, que al paso de los años sigue siendo muy concurrida.
Otra causa que provoca el abandono de las plazas es que muchas no se modernizaron, como El Campanario, que a decir de los clientes, se quedó con el diseño de la década de los 90, cuando todos sus locales estaban llenos, y hoy solo se ocupa una cuarta parte. El resto está maloliente, transmite inseguridad y abandono.
Entre los comentarios también se hace referencia a que los dueños de algunas plazas no estudiaron a su competencia o no realizaron un estudio de mercado, como en el caso de Plaza América y Plaza Platino. Señalaron que, en el caso de la primera, no pudo competir contra Plaza Crystal, que está a una calle, mientras que Platino está a 5 minutos de Plaza Dorada.
No contar con tiendas ancla, como Liverpool, Sears u otras firmas, también es un factor para que las plazas comerciales mueran o se mantengan a flote con algunas salas de cine, oficinas gubernamentales y hasta call centers.
¿Cuál fue el primer centro comercial en el mundo?
Los centros comerciales surgieron en el siglo XX como una adaptación del mercado tradicional a la sociedad de masas surgida gracias a la economía industrial moderna. Así, la idea inicial era brindar a este tipo de establecimientos un espacio propio para estacionar vehículos, de modo que el acceso fuese más simple y más propicio para los consumidores, que ingresan a un espacio claramente diferenciado de la calle.
El primer centro comercial de la historia se construyó en Kansas City, Estados Unidos, en 1922. Se llamaba Country Club Plaza y fue construido por la J. C. Nichols Company. Poco después, en 1956, se construyó en la ciudad de Minneapolis el primer centro comercial cerrado, es decir, claramente distinguido del entorno público, lo que sentó un importante precedente en la construcción de estas edificaciones.