Los taquitos, mole de panza, pozole y otros platillos de la gastronomía mexicana no sabrán igual sin su toque de limón, ya que la inflación ha golpeado el costo de este producto que en Puebla se vende entre 50 y 70 pesos el kilo.
En mercados municipales, las amas de casa, locatarios de cocinas económicas y del sector restaurantero han tenido que ajustar sus compras para que en el mejor de los casos puedan adquirir un kilo de limón o, de plano, prescindir de este cítrico.
En puestos del mercado Morelos, al oriente de la capital, el kilo de limón Colima se vende en 47 pesos, mientras que en el mercado La Acocota su valor es de 55 pesos, y en el supermercado de la zona tiene un costo de 70 pesos el kilo.
Este incremento en el precio del producto ha desatado una ola de memes en redes sociales, donde se puede observar imágenes de arpillas de limón transportadas en camionetas de valores.
También se pueden leer comentarios que en lugar de comprar limón, mejor hubieran invertido en bitcoins, o trueques de una maceta de un árbol de limón a cambio de una propiedad como terreno o casa.
“Si del cielo te caen limones, no hagas limonada ¡mételos en la caja fuerte!”, aconsejan en redes sociales.
De acuerdo con el Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera (SIAP), en México se cultivan tres especies de limón: agrio o mexicano; persa; e italiano.
En los meses de febrero, marzo y noviembre escasea el producto y se estima que en promedio un mexicano consume 14.5 kilos de limón al año.