Leonor Vargas Gallegos, directora del Sistema Estatal para el Desarrollo Integral de la Familia (SEDIF), dio a conocer que de las 31 familias que perdieron sus casas por la explosión en San Pablo Xochimehuacán -ocurrida el 31 de octubre de 2021-, nueve se niegan a ser reubicadas.
Así lo dio a conocer durante el informe que este lunes presentó la Comisión Interinstitucional para los trabajos de reparación en la junta auxiliar del municipio de Puebla.
Dijo que de las 31 familias que tienen que ser reubicadas a la zona de El Batán, 22 firmaron su autorización y las restantes se negaron.
Añadió que en el caso de las 28 familias a quienes se les reconstruirán sus viviendas en la misma zona de la junta auxiliar de San Pablo Xochimehuacán, una no quiso firmar.
De las cinco víctimas mortales, se entregó la ayuda a los deudos, a excepción de uno porque se encuentra en prisión.
En ese sentido, el gobernador Miguel Barbosa ordenó al jurídico que analice el caso a fin de determinar si puede recibir el beneficio tras la muerte de su familiar.
A las 12 personas que resultaron lesionadas se les entregó todo tipo de apoyo, y a las familias en la junta auxiliar se les repartieron despensas, otorgaron consultas médicas y asesorías legales.
Por su parte, Roberto Tenorio García, secretario de Infraestructura, informó que las 59 viviendas que resultaron con daños estructurales se demolieron en su totalidad; en tanto, se repararon 179 casas con daños de moderados a leves.
En la zona de El Batán, donde serán reubicadas 31 familias, comenzaron con el desarrollo de la urbanización, de lo cual se tiene un avance del 13 por ciento.
En ese sentido, el gobernador Miguel Barbosa ordenó que se agilicen los trabajos en esta zona para que en breve se entreguen las casas a las familias afectadas.
Lorenzo Martínez, director general de Tenencia de la Tierra, abundó que se iniciaron 59 expedientes de regularización a las familias que se asentaron en zonas prohibidas.
