Los moteles de Puebla han sido escenas de crímenes en los últimos años, de acuerdo con revisiones hemerográficas sobre el tema.
Uno de los casos más controversiales fue el de Mara Castilla Miranda, una joven veracruzana de 19 años que estudiaba Ciencias Politicas en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP).
La joven y sus amigos salieron a divertirse a un antro de San Andrés Cholula el 7 de septiembre de 2017, un día después se reportó su desaparición y fue hasta el 15 de septiembre del mismo año cuando su cuerpo fue localizado con huellas de violencia en Santa María Xonacatepec.
En las investigaciones se identificó que Ricardo Alexis Díaz, el conductor de un Cabify que había solicitado la estudiante, no la dejó en su casa y la llevó al Motel del Sur de la 11 Sur y 105 Poniente, donde se presume ocurrió el asesinato.
El juicio del operador se resolvió hasta abril de 2021 y a pesar de los esfuerzos de sus abogados, se le declaró culpable con una sentencia de cárcel de 50 años y la obligación de un pago de 300 mil pesos.
La violencia hacia los universitarios continuó y el 18 de mayo de 2018 volvió la consternación con el asesinato de Aldo Islas Todd, quien a sus 21 años estudiaba Contaduría en la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
El 17 de mayo de 2018, él y otros tres hombres y dos mujeres rentaron dos cuartos en el Motel Miño, ubicado en la 8 Oriente 2603, pero sólo cinco jóvenes dejaron las habitaciones y un día después el personal halló el cuerpo del universitario.
En los siguientes días la Fiscalía General del Estado (FGE) aprehendió a los acompañantes y resolvió que uno de los hombres era un amigo de Aldo, quien organizó, junto con el resto, un secuestro en el que de inicio pidieron 750 mil pesos a su familia.
La comunidad transgénero también ha sido víctima en los moteles, pues el 21 de diciembre de 2020, en un inmueble ubicado en 5 Oriente, a la altura del Centro Histórico, fue asesinado Alejandro Abisaí Z., un joven de 26 años originario de Veracruz y que se desempeñaba como maquillista.
Activistas en pro de los derechos de la diversidad sexual señalaron que los hechos habrían ocurrido luego de que se citara con una persona que conoció en redes sociales y exigieron que las investigaciones tuvieran un enfoque de violencia de género.
La violencia feminicida en los moteles de Puebla continuó hacia 2021 y 2022, años en los que se registraron al menos tres casos con violencia hacia las mujeres y sin que se tratara de denuncias mediáticas como la de Mara Castilla.
El 13 de enero de 2021 fue localizada en el Motel Jacarandas de la colonia Cleotilde Torres una mujer que perdió la vida a golpes.
El 28 de julio de 2022 ocurrió un hecho similar en el Motel Sade, ubicado en la 16 de Septiembre y 119 Poniente, cuando trabajadores localizaron a una mujer sin vida en un jacuzzi tras haber ingresado en un taxi la madrugada anterior.
En tanto que el 4 de octubre de 2022, en el Motel San Fernando ubicado en San Juan Tlautla, San Pedro Cholula, se localizó a una joven desconocida de entre 25 y 30 años.
En el último año, los moteles de Puebla también han sido protagonistas de otro tipo de muertes provocadas supuestamente de manera accidental.
En agosto de 2023, por ejemplo, en el Motel Queens ubicado en la colonia Guadalupe Hidalgo al sur de la capital, murieron dos jóvenes de 21 y 24 años, aparentemente por intoxicación con monóxido de carbono.
Mientras que el 20 de abril de 2023, en el Motel Bambú, ubicado en la avenida Héroes de Nacozari y 30 Poniente, se localizó a un trabajador de 53 años ahogado en la cisterna y se planteó que fue un accidente.
