La Catedral de Puebla abrirá la Capilla de las Reliquias y la Cripta de los Obispos, los próximos días 1 y 2 de noviembre.
Ello con el propósito de recordar a los santos de la iglesia católica, en el marco de la celebración de las festividades de Todos Santos y los Fieles Difuntos.
Así lo expresó el rector de la catedral poblana, Francisco Vázquez Ramírez, al convocar a la feligresía a visitar ambos espacios.
Agregó que tanto la Cripta de los Obispos como la Capilla de las Reliquias se abren solo una vez al año, durante los días 1 y 2 de noviembre, a partir de las ocho de la mañana.
Asimismo, precisó que el 1 de noviembre se abrirá la Capilla de las Reliquias, donde hay varias de primer grado (partes de los cuerpos de los santos), para que los fieles puedan acercarse a ellas y conocer la historia de los beatos.
El día 2 se abrirá la Cripta de los Obispos, donde reposan 22 de los 40 prelados que ha tenido Puebla.
Adicionalmente, comentó que el domingo se abrirán once capillas donde se ubican “cuerpos santos”.
Y se montó una ofrenda, en el altar del perdón, que tiene en la parte central la imagen del obispo Roberto Huesca Pacheco.
Explicó que la catedral cuenta con más de 400 reliquias y la mayoría están situadas en la capilla que lleva el mismo nombre, aunque otras más están distribuidas en los diversos altares.
Los fieles, refirió, entre otras, podrán apreciar las reliquias de Juan de Palafox, Santa Catalina de Siena y San Sebastián de Aparicio.
Explicó que las reliquias se clasifican en tres grados: las de primer grado son partes del cuerpo del santo, las de segundo son ropa, objetos y utensilios que ocupó en vida, mientras que las de tercero son todas las cosas que tuvieron contacto con el mártir.