Es probable que camines todos los días por esta calle y veas el edificio o lo visites un fin de semana para comer o degustar de alguna bebida refrescante, pero tal vez desconozcas que ahí hay una parte de la Torre Eiffel.
En la esquina de la calle 2 Norte y 2 Oriente, en pleno Centro Histórico de Puebla, se ubica una cafetería de reconocida marca, una sucursal de una cadena de restaurantes y la Capilla del Arte de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).
Sin embargo, antes de esos comercios, hay mucha historia detrás que data desde 1910, cuando este edificio fue inaugurado por un grupo de migrantes franceses que llegaron a Puebla ante la apertura que dio el entonces presidente Porfirio Díaz para que se asentaran en el país.
Para la construcción de este edificio, los franceses se inspiraron en el Palacio de Cristal de Londres, ya que el objetivo era instalar una gran tienda de ropa. Por lo tanto, se buscó simular las cajas de luz mediante espacios con amplios escaparates para que se pudiera mostrar la mercancía y se notara desde la calle.
Para la estructura se utilizó el hierro porque desde entonces portaba solidez, estabilidad y ligereza a la construcción, pero pocos saben, o al menos eso dicta una leyenda, que para este hierro se utilizaron desechos de la construcción de la Torre Eiffel en París, Francia, mismos que fueron enviados por barco y llegaron a México por el Puerto de Veracruz.
La idea era tener un edificio muy de estilo parisino, que también tuviera un toque de las Nouvelles Galeries de Bourges y su diseño Art Nouveau, por lo que ahora, cuando transites por esta calle podrás detenerte unos minutos para admirar el edificio que mide cerca de 1 mil 581 metros cuadrados y cerca de cinco mil metros cuadrados de construcción.
Su fachada tiene expuesta las columnas de hierro en verde oscuro que se mezclan con piedra traída de Izúcar de Matamoros y enormes ventanales, lo que lució en su momento toda la mercancía que vendía como Fábricas de Francia, que después pasó a otras razones sociales como Almacenes Blanco y otros más, hasta que permaneció así abierto en noviembre de 1974.
En esta admiración puedes notar una placa que refiere que la estructura metálica fue construida por la empresa Schwartz & Meurer de París, los mismos que se encargaron de construir la Torre Eiffel.
Por esta historia y belleza arquitectónica, el Instituto Nacional de Antropología e Historia de México, el 19 de agosto de 1983, lo declaró monumento histórico, en conformidad con la Ley Federal sobre Monumentos y Zonas Arqueológicas, Artísticas e Históricas.
Apreciar el trabajo de recuperación que ha hecho la Fundación Mary Street Jenkins y por lo cual se abrió la Capilla del Arte a cargo de la Universidad de las Américas Puebla (UDLAP).