Un lector de libros digital es un dispositivo que reproduce el contenido de libros en diversas ventanas, de manera que puedes leer varios libros a la vez, y uno de esos artículos de más de 400 años de creación se puede conocer en la Biblioteca Palafoxiana de Puebla.
Hace siglos atrás este curioso invento era conocido como rueda de libros y fue creación del ingeniero italiano Agostino Ramelli en el año 1588, con el objetivo de dar respuesta a una necesidad que tenían los investigadores, a los religiosos, a los estudiantes que tenían que consultar varias lecturas a la vez.
La rueda de libros que se puede conocer en la Biblioteca Palafoxiana consiste en un atril en forma circular, hecho de madera, con al menos seis divisiones para ahí colocar los libros a colocar y leer.
Con su diseño no solo se logró la consulta de varios libros al mismo tiempo, sino una inclinación idónea para su lectura.
Un artículo escrito por Borgeano describe que el diseño de la rueda de libros apareció por primera vez en una ilustración del siglo XVI y se presentaba como uno de los 195 diseños en la publicación “Las diversas e ingeniosas máquinas del Capitán Agostino Ramelli”.
Ramelli incorporó un arreglo con engranaje epicicloidales, un dispositivo complejo que únicamente había sido utilizado anteriormente en relojes astronómicos. Utilizando la gravedad se podía obtener el mismo resultado, como en el caso de las ruedas de feria, inventada siglos después, pero el sistema de engranajes le permitía demostrar su habilidad matemática.
El ingeniero italiano describía su creación como “una máquina bella e ingeniosa, muy útil y conveniente para cualquier persona que se deleita en el estudio, especialmente aquellos que están indispuestos y atormentados por la gota. Porque con esta máquina un hombre puede ver y abrir una gran cantidad de libros sin moverse de un lugar”.
Este lector o rueda de libros se encuentra en la Biblioteca Palafoxiana, recinto que se encuentra al interior de la Casa de Cultura del gobierno del estado, ubicado en el segundo piso del edificio en la calle 5 Oriente número 5, a un costado de la Catedral de Puebla.
Esta biblioteca surgió a raíz de la donación de su acervo literario que hizo el obispo Juan de Palafox y Mendoza el 5 de septiembre de 1646.
La donación se compone de 5 mil volúmenes y era para los seminaristas de los colegios tridentinos, ordenando que pudiera ser consultada por todo aquel que quisiera leer o estudiar, por lo cual es considera la primera biblioteca pública del Continente Americano.
También se considera un Monumento Histórico de México por su bellísimo recinto emblema del barroco novohispano y fue incluida en 2005, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), como parte del programa Memoria del Mundo por su acervo bibliográfico de fondo antiguo.
Este antiguo invento y miles y miles de libros, algunos incunables, los puedes conocer de martes a jueves de 10:00 a 17:00 horas y viernes a domingo de 10:00 a 18:00 horas, pagando 45 pesos por persona.