Desde su fundación, Puebla ha crecido a pasos agigantados. Las personas comenzaron a llegar de todos lados y fue necesario expandir la mancha urbana más allá del Centro Histórico, lo que dio paso al nacimiento de varias colonias, entre ellas, las más caras.
Estas viviendas se construyeron en la periferia de la ciudad, lugares atractivos que contaban con cuerpos de agua, árboles y plantas.
Sus dueños, que eran personas adineradas y extranjeras, comenzaron a construir nuevas residencias en lo que en ese entonces eran las orillas de puebla.
Una de ellas fue La Paz, quizás la colonia más icónica de Puebla, donde hasta la fecha se pueden ver residencias, condominios y restaurantes.
La Paz fue fundada en 1931 en uno de los cerros más vistosos de Angelópolis, el de San Juan. Según el historiador David Ramírez Huitrón, fundador del sitio Puebla Antigua, este cerro era conocido en tiempos prehispánicos como Centepec, denominado como el "único cerro" o el "cerro de la diosa del maíz".
Esta elevación destacaba como la única de importancia en la salida occidental de la Ciudad de Puebla.
Desde su concepción, se pensó como una colonia residencial para las familias acomodadas poblanas. Sin embargo, además de empresarios y políticos, a esta zona también llegaron a vivir familias de ascendencia libanesa o española.
Por otro lado, los salarios de diferentes sectores de trabajadores, les permitían costear viviendas de diferentes tipos, creando diferentes asentamientos en donde se convivían por gremios.
Rodeados de ambiente tranquilo y un estilo de vida saludable, los habitantes de La Paz forjaron ahí sus historias de vida y le dieron identidad a sus calles, sus jardines y su iglesia levantada en lo más alto del cerro.
La empresa Fraccionamientos de Puebla fue la encargada de la promoción y venta de lotes residenciales, vendiendo esta zona como “exclusiva, orgullo de Puebla y una obra perfecta del urbanismo moderno”.
Actualmente, el cerro de La Paz cuenta con una variedad de establecimientos y servicios que incluyen hoteles, instituciones educativas, restaurantes, emisoras de radio y televisión, además de la Parroquia de Nuestra Señora del Sagrado Corazón, conocida informalmente como la Iglesia del Cielo.
Esta iglesia, fue construida a principios de los años 60’s y para 1969 ya estaba casi terminada. Fue promovida por el Padre Rafael Figueroa Ortega y se ha convertido en unos lugares más destacados de la zona, ya que es visible desde muchos puntos de la ciudad.
