El inicio del ciclo escolar 2022-2023 trajo consigo, de nueva cuenta, el registro de tráfico vial en torno a los planteles y centros educativos, ubicados sobre algunas de las principales arterias de la capital de Puebla.
Las horas de entrada y salida de los alumnos de preescolar, primaria y secundaria implican un caos debido a que los padres suelen estacionarse hasta en triple fila y el acceso de los alumnos a los planteles por lo regular no es ágil.
Así que los papás llegan con prisa, y si hay fila hacen una doble o triple, y no se van del lugar hasta que sus hijos hayan bajado del vehículo con sus pesadas mochilas y verlos entrar a la escuela.
El acceso a los planteles ahora es más tardado, pues se toma la temperatura de alumnos y se les aplica gel antibacterial.
Así, por ejemplo, el tráfico sobre la 11 Sur, con sentido al centro, antes de llegar al Paseo Bravo, donde se ubica el Instituto Angelopolitano, se encuentra entre las zonas donde más se entorpece el tráfico.
Otra área donde es cotidiano apreciar tráfico lento es la comprendida entre la 11 Sur y 31 poniente hasta la 15 Sur, donde se ubica la facultad de Medicina de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP).
Además de las calles aledañas al Centro Escolar Niños Héroes de Chapultepec, cuya entrada principal se ubica sobre el bulevar 5 de mayo.
El Benemérito Instituto Normal del Estado, ubicado sobre el bulevar Hermanos Serdán, hay además varias unidades de transporte escolar que dificultan el paso de otros automovilistas.
El bulevar Valsequillo, donde se ubica la Ciudad Universitaria, es otro de los puntos donde se registra intenso tráfico vial.
En general, en vialidades como la 11 Norte-Sur, la avenida 16 de septiembre, la Vía Atlixcáyotl, el Bulevar Héroes del 5 de Mayo, la 31 Oriente-Poniente, la 25 Oriente-Poniente, la avenida Las Torres, la Calzada Zaragoza, la avenida 15 Sur y el Circuito Juan Pablo Il hay caos diario.