Los trabajos de remoción de escombros de las autoridades no fueron impedimento para que familiares y amigos le dieran el último adiós al hombre que murió tras la explosión de la toma clandestina de gas LP, en la junta Auxiliar San Pablo Xochimehuacán de la capital de Puebla.
A bordo de una carroza fúnebre, las personas llegaron este lunes 1 de noviembre con los restos de Abimael Eduardo, de 32 años de edad, al panteón de la demarcación ubicado sobre la Avenida Ferrocarril.
A la altura de la calle Palos las autoridades de los tres niveles de gobierno realizan los trabajos del retiro de escombros, pero aún así los deudos pudieron ingresar con el ataúd.
Entre rezos y cantos, familiares y amigos sepultaron a Abimael, quien dejó en orfandad a dos menores de edad.
La familia de Lalito, como le decía su madre -quien no paró de llorar-, será indemnizada por el gobierno del estado, lo cual aseguró el mandatario Miguel Barbosa.
Como EL UNIVERSAL PUEBLA lo informó, la explosión ocurrida la madrugada de ayer domingo 31 de octubre también dejó 17 personas heridas, ocho de las cuales están en condiciones de gravedad.