La Catedral de Puebla, independientemente de su riqueza arquitectónica y cultural, cuenta con retablos, que incrementan su valor.
La expresión artística y cultural de los retablos de la Catedral poblana, por sí sola, constituyen un tesoro que debe ser apreciado de manera adecuada.
En principio tenemos al denominado Altar de los Reyes, el retablo fue diseñado en 1646 a petición del obispo Palafox.
La capilla fue proyectada por el español Juan Martínez Montañés y el retablo principal de estilo barroco salomónico fue obra del maestro Lucas Méndez.
Se llama Altar de los Reyes, debido a que en sus nichos laterales están plasmadas las imágenes de reyes y reinas canonizados.
Está compuesto de un retablo principal, dos retablos laterales, el sagrario y es coronado por una cúpula sobre pechinas, pintada por Cristóbal Villalpando en 1688.
La capilla de San Pedro posee un retablo del año 1830.
En la capilla de Nuestra Señora de Dolores, hay un retablo en que se puede observar una representación de la Virgen de Dolores, además del Calvario.
La capilla de las Santas Reliquias tiene un retablo que es una réplica del de la Basílica de Guadalupe, hecho por José Manzo.
La capilla de Nuestro Señor de la Soledad tiene un retablo de estilo neoclásico.
La capilla del Espíritu Santo tiene tres retablos barrocos.
Recorrer la Catedral de Puebla y cada una de sus capillas, brinda al visitante la posibilidad de disfrutar de su belleza y en particular de los retablos
¿Qué es un retablo?
La palabra retablo proviene del latín retro-tabulum, que puede interpretarse como la tabla que se coloca detrás del altar.
Su finalidad es, por medio de las imágenes, fortalecer la fe y los principios morales, ya que es la estructura arquitectónica, pictórica y escultórica.
Las capillas de la Catedral
Además del Altar Mayor, la Catedral de Puebla cuenta con:
- Capillas del Evangelio
- Capillas de la Epístola
- Altar de los Reyes
- Capilla del Espíritu Santo
- Capilla del Sagrario Metropolitano