Ni un mes llevaba de abierto al público, cuando autoridades anunciaron el cierre de los lavaderos de Almoloya, un sitio histórico que data del siglo XVII y que recientemente había sido recuperado por el gobierno del estado.
A través de las redes sociales, se dio a conocer que visitantes acudieron este domingo a este lugar que se encuentra en la lateral del Bulevar 5 de Mayo y la 14 Oriente, cuando los vigilantes a la zona les indicaron que no se permitía el paso.
La razón del cierre, presuntamente, se debe a que turistas pisaron una laja y dañaron un lavadero, por lo que personal del Centro del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Puebla ordenó que se prohibiera el acceso de la gente, hasta que se lleven a cabo las restauraciones.
Además, por las recientes lluvias que se han registrado en Puebla capital, el túnel que se encuentra a un costado de los lavaderos, permanece inundado.
De acuerdo con una publicación del historiador David Ramírez Huitrón, en este sitio habían dos veneros de agua dulce cuyos derrames corrían hacia el río San Francisco, el cual en su nombre náhuatl era conocido como Almoloya, "Agua que brota", de ahí el nombre de los lavaderos de Almoloya.
En el siglo XVII, a causa de un terremoto, uno de los ojos de agua ( el llamado "del Agua Santa") se quedó seco, aprovechándose únicamente el ojo principal.
Hoy los habitantes del centro histórico de Puebla siguen disfrutando de esta agua, la cual ahora se almacena en un gran tanque cisterna ubicado en el Paseo de San Francisco y que luego es bombeada a la cima del cerro de Loreto.
Estos lavaderos eran usados por las familias poblanas para lavar ropa, por allá de 1704, pero fue en 1863 cuando se clausuraron debido al deterioro de la zona.
En el 2015, junto a la zona de construyó un hotel que se anexó esta área y la hizo privada para el disfrute de sus clientes, quienes podrían admirarlo desde el área del bar del hotel.
El gobernador Miguel Barbosa Huerta recientemente dio a conocer que el patrimonio de Puebla era para los poblanos y por ello rescató de manos de particulares los lavaderos de Almoloya.
Por lo anterior, el 22 de mayo del 2022 se anunció la apertura al público en general de este sitio histórico donde las mujeres pasaban hasta seis horas arrodilladas tallando a mano la ropa.