Un cafre del transporte público atropelló a una joven mujer y a sus cuatro menores hijos, en la junta auxiliar de San Miguel Canoa, de la capital de Puebla.
Raquel Pérez, de 26 años, salió de trabajar la noche de este lunes 20 de febrero y empezó a caminar rumbo a su domicilio sobre las calles de la Primera Sección.
Sin embargo, no iba sola, sino con sus cuatro hijos de 1, 2, 5 y 6 años que previamente había pasado a recoger a un inmueble, del cual hasta el momento se desconoce si es de alguno de sus familiares.
La llegada a su casa estaba cada vez más cerca, a escasas tres cuadras de distancia.
Los cuatro menores mostraban cansancio, pero su joven madre los alentaba a no desfallecer con la promesa de un vaso de leche de recompensa.
Cuando la distancia se acortaba, se escuchó el rechinido de las llantas de una unidad, dando vuelta a exceso de velocidad hacia la calle donde caminaba la familia.
Se trataba del conductor de una combi de la Ruta IDN, unidad 18.
Su falta de pericia ocasionó que se llevara de frente a Raquel y a sus cuatro hijos, quienes quedaron tendidos sobre el asfalto.
En lugar de darse a la fuga, el chofer se bajó de la combi del transporte público y se acercó a ver si estaban bien.
Los testigos corrieron para intentar ayudar, pero terminaron pidiendo ayuda a los cuerpos de emergencias.
Pese a lo impactante del accidente, la joven mujer y sus hijos estaban conscientes cuando fueron llevados por paramédicos a un hospital.
Mientras que el chofer del transporte público fue detenido por policías municipales y este martes 21 de febrero está a la espera de la determinación legal en su contra por parte del Ministerio Público.
