En la fanpage Puebla Antigua se compartió una fotografía de la terminal de autobuses Flecha Roja, Estrella Roja y Círculos de Oro (ERCO) que se ubicaba en la calle 14 Poniente, entre las calles 9 y 11 Norte, del Centro Histórico de Puebla.
La imagen, que corresponde a la hemeroteca Juan Nepomuceno Troncoso, de inmediato desató una ola de comentarios entre los usuarios, pero sobre todo generó que la gente reviviera recuerdos de la Puebla de la década de los 70 y 80.
En esta terminal llegaban los pasajeros que viajaban a la zona sur y sureste de Puebla y de otras entidades, pues de ahí salían las unidades que iban a Atlixco, Izúcar de Matamoros, Huehuetlán el Grande en Puebla; así como a Tepalcingo, Cuautla y Cuernavaca, en Morelos; Huajuapan de León y Tlaxiaco, en Oaxaca.
Los camiones también llegaban a Tehuitzingo, Las Palomas, Chinantla, Piaxtla, Tecomatlán, Crucero de La Unión Progreso, Santa Ana Rayón y San Juan Cieneguilla, entre otras comunidades.
Como en esa época aún no se construía la Central de Autobuses de Puebla (CAPU), en el primer cuadro de la ciudad había más de dos terminales terrestres y en el caso de la Flecha Roja y ERCO las salidas y entradas de unidades eran constantes, pero no generaban congestionamientos en las calles aledañas porque eran pocos los autos particulares en comparación con la de ahora.
De esta manera, los camiones, modelos Sultana y Dina Capre, abordaban y dejaban a los pasajeros, quienes con su presencia mantenían los pequeños comercios que ahí se establecieron.
Los viajeros hacían de su rutina comprar un refresco en los pequeños expendios que ahí se encontraban, o pasaban por las deliciosas tortas planchadas que se vendían enfrente en la tortería Rojas, o si llegaban de un viaje entraban a comer un coctel de camarón en la famosa marisquería José Luis.
A la vuelta de la 14 Poniente podían conocer, los que recién llegaban a Puebla, la terminal de los trenes que hoy es el Museo Nacional de los Ferrocarriles Mexicanos.
“¡Qué recuerdos! Yo viajé en el Flecha Roja del sur cuando todos los bultos iban arriba del camión en la canastilla”, “Yo pasaba con mi papá a finales de los 80 y aún operaba la terminal”. “¡Qué tiempos! Por qué el mundo tiene que cambiar cuando lo más básico para uno era ser feliz”, “Tiempos aquellos, no había mucho progreso y ni tanta gente, pero sí mucha tranquilidad”, fueron parte de alguno de los recuerdos que compartieron los usuarios.
Fue a principios de la década de los 90 que la línea Flecha Roja, que para muchos era para viajeros de segunda clase y los ERCO para viajeros de primera, se fueron a la calle 19 Norte, cerca de la Beneficencia Española.
Ahí permaneció un par de años hasta que se instalaron en la CAPU, donde siguen operando como Gran Línea Oro y sus filiales ERCO y Surianos, dando servicio a viajeros que van a Atlixco, Izúcar de Matamoros, Huajuapan, Amayuca, Cuautla, Cuatro Caminos incluso tienen una corrida a Huamantla, Tlaxcala.
Actualmente, donde fue la terminal de los autobuses Flecha Roja y ERCO, funciona un estacionamiento público, donde aún se conserva la reja y un barandal que separaba en andén número 1 para los viajeros de primera clase.
